martes, 19 de marzo de 2013

Ocio de Luna

Hay tinta negra
en tu rostro pecoso,
es una gota que pasó
y se le cayó al la luna.

Es una estrella
que imita una lágrima,
una de esas que astuta resbala.

Bajó más que las otras
y se inmortalizó en el mármol
de piel que cubre tu rostro.

Pero qué ocio del astro
nocturno
que decidió pintarte su seña
y mejoró a la belleza perfecta
con detalles lunares.

Lunas en tus ojos,
luna bajo tu nariz,

lunas por tu piel.


domingo, 17 de marzo de 2013


Piel, piel,piel por todos lados,
canciones escritas por los orgasmos
que alborotados, sudando, exhaustos y felices
desenvainan la imaginación de nuestros huesos hambrientos
por tocarse y besarse unos a otros.

Placer, placer, placer por todos lados,
gotas de éxtasis que brotan por los poros,
por los oídos, por la boca, por tu ano,
por todo orificio que quiere sentir algo y frotarse
sobre el tacto del otro que bañado y aún sediento
del ácido que libera el amor al des-orgullo se ahoga
entre los gritos de uno mismo y del otro
y aquella muerte espontanea e infinita
que abre las puertas de la percepción humana
se va diluyendo poco a poco mientras regresas
a los limites que te impone estar vivo.

Gritos, gritos, gritos, rasguños y nalgadas
y un esfuerzo sobre humano de no olvidarse
del cuerpo del otro, caliente y explotado
porque su mente y su alma y su vida simple
y limitada y normal como la tuya también están
regresando y cómo olvidarse de ese acompañante
que aparte de todo es tu amante y el amor de tu vida.

jueves, 14 de marzo de 2013

Lunares

Gotas negras
del cuadro de Polock ,
desperfectos perfectos
de tamaño precioso,
estrellas curiosas
que gozan bailando,
placeres de mi vista,
guías turísticas
de mi lengua,
detalles de carne,
de diosa, de mujer,
camino hacia el cielo,
al infierno, al placer.

De donde viene

Vino del infierno,
de los pecados lujuriosos
y la sangre del amor,
atravesó la tierra
por la semilla de la rosa
y a partir de los deseos
de las reinas,
de sus sentidos
y sus gustos,
de la poesía
de los enamorados
y de la sangre de los colibríes
se ha llegado a posar
el rojo en tus labios.